Una enérgica joven desobedece a sus padres y se va al bosque por la tarde. Visita una casa, aparentemente vacía, donde come de tres tazones de avena, se sienta en tres sillas, destroza una y luego se duerme en la cama más pequeña. Cuando es capturada, aprende una lección importante sobre el respeto de los derechos a la privacidad de otras entidades y otra lección sobre la veracidad.