El plazo para pagar la deuda se acaba y Antonio está desesperado. Ya no sabe qué hacer ni dónde buscar el dinero para que Mateo y el chirivito se esfumen y pasen a formar parte de un mal sueño. La certeza de Mercedes de que a su marido le ocurre algo muy grave se verá confirmada cuando una visita inesperada irrumpe en San Genaro abriéndole los ojos.